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Children with bulimia (bu·lim·ia) nervosa tend to eat large amounts of food at once (called “binge eating”) and then do something to avoid gaining weight, such as make themselves vomit. En Children's Health℠, les ayudamos a desarrollar hábitos saludables en torno a la comida y la imagen personal abordando los problemas personales, médicos y sociales que desencadenan su comportamiento de bulimia.
La bulimia es un trastorno de la alimentación. Los trastornos de la alimentación son afecciones por las cuales las personas tienen hábitos de alimentación anormales y poco saludables porque desean tener un determinado tipo o aspecto corporal. Las diferencias en el cerebro de un niño afectan sus pensamientos, deseos y comportamientos sobre los alimentos.
La bulimia lleva a las personas a tener episodios frecuentes de atracones de comida seguidos de “purga” o intento de dejar de aumentar de peso. Los niños a menudo se “purgan” y se inducen el vómito. También pueden tomar laxantes para promover las deposiciones o hacer cantidades excesivas de ejercicio.
Personas de diferentes orígenes, etnias, religiones y culturas pueden tener bulimia.
La bulimia es más frecuente entre las adolescentes y las mujeres jóvenes, pero también afecta a los niños y los hombres.
La bulimia puede ser difícil de reconocer, ya que los niños con bulimia suelen tener un peso promedio para su edad. Pero suelen tener hábitos y comportamientos particulares. También pueden tener problemas de salud como resultado de atracones frecuentes y vómitos o de usar laxantes para vaciar el estómago.
Behavioral signs of bulimia:
Medical or physical signs of bulimia:
Con el tiempo, el comportamiento bulímico daña el cuerpo de un niño. Hable con su médico de inmediato si el peso de su hijo cambia drásticamente (ya sea aumento o descenso de peso), si el rostro o las glándulas de su hijo se hinchan, o si nota pérdida de cabello, temblores, o sed o frío extremos.
Otros signos incluyen:
Solo los profesionales médicos pueden diagnosticar correctamente la bulimia. Para ello, recopilan información sobre la salud y el comportamiento de su hijo a través de entrevistas, pruebas y exámenes.
Pueden incluir los siguientes:
Los niños no eligen ser bulímicos. Y no se vuelven bulímicos debido a su crianza.
Un niño es bulímico debido a la forma en que su cerebro reacciona a los impulsos y mensajes sobre los alimentos, la salud y la imagen corporal. Muchos factores juegan un papel importante para que esto suceda. Estos incluyen la genética, el estrés y las presiones sociales y culturales para tener un peso o aspecto particular.
La mayoría de los niños que tratamos por bulimia vienen a la clínica para recibir terapia y controles regulares. Algunos niños se benefician de permanecer en el hospital hasta que el trastorno de la alimentación esté bajo control. Generalmente, esto se debe a que también tienen otros problemas de salud, como desnutrición o depresión.
Creamos un plan de tratamiento basado en las necesidades individuales de cada niño.
El tratamiento puede incluir lo siguiente:
Nuestro equipo se especializa en el tratamiento de trastornos de la alimentación en niños y adolescentes, incluidos niños varones y menores de 12 años. Trabajamos en equipo con usted y otros miembros de la familia, con el fin de brindarle a su hijo la atención que necesita.
La bulimia en los niños aparece con mayor frecuencia entre los 10 y los 15 años. También puede afectar a niños más grandes y más pequeños.
Si cree que su hijo podría ser bulímico, debe buscar ayuda de profesionales que se especialicen en trastornos de la alimentación infantiles. Solo ellos pueden proporcionar los diferentes recursos y terapias que son necesarios para ayudar a su hijo a controlar su afección.
En casa, lo más importante que debe hacer es tratar a su hijo con amor y compasión. Muchos niños sienten vergüenza por su bulimia. Hágale saber que le importa y no lo culpe. Haga que las comidas sean un momento para que toda la familia disfrute de estar juntos.
La bulimia sigue un patrón de atracones y luego, por ejemplo, vomitar para evitar el aumento de peso. Los niños con bulimia suelen tener un peso promedio.
Los niños con anorexia también se preocupan por el aumento de peso, pero generalmente lo evitan comiendo cantidades limitadas y haciendo ejercicio en exceso. Casi siempre tienen bajo peso.
Muchos niños que tienen anorexia también tienen bulimia en algún momento. Pueden vomitar porque no hicieron ejercicio o porque están preocupados porque comieron demasiado.
Los trastornos de la alimentación suelen surgir cuando las personas son jóvenes. Pero no son una “fase” por la que un niño pasa y luego se deja atrás. Son afecciones médicas que pueden durar hasta la adultez y causar problemas graves si no se tratan.
Los niños con bulimia suelen tener un peso normal. A menudo, se sienten avergonzados por sus comportamientos y se vuelven muy buenos para ocultarlos.
Los niños con bulimia no tienen una dieta equilibrada ni permiten que sus cuerpos absorban nutrientes. Frequent vomiting and other purging behaviors can cause dehydration and damage a child’s organs. If bulimia isn’t treated, it can be fatal because of serious health problems or depression that leads to suicide.
Un antidepresivo llamado fluoxetina ha sido aprobado para el tratamiento de la bulimia. Funciona aumentando el nivel de serotonina del cuerpo, una sustancia química que afecta el estado de ánimo y el apetito. Muchas personas con bulimia tienen menos serotonina que el promedio.
Asegúrese de hablar en profundidad sobre los antidepresivos con el médico de su hijo. Algunos antidepresivos pueden causar efectos secundarios no deseados en niños y adolescentes.
Las familias son esenciales para ayudar a los niños con bulimia a mejorar. Tenga compasión por su hijo y por los miedos y las dificultades que conlleva su trastorno. Ayúdelo a comprender su trastorno y cómo cambia la forma en que piensa y actúa en torno a los alimentos. Reúna a toda la familia para disfrutar de comidas regulares, relajadas y saludables. Acciones como estas ayudan a que los niños con bulimia se sientan seguros y apoyados mientras crean hábitos de alimentación más saludables.