Cómo prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos

Conozca las causas comunes de las enfermedades transmitidas por los alimentos, qué hacer si hay una retirada de alimentos y precauciones simples de seguridad de los alimentos para proteger al niño.


Las retiradas de alimentos y los cierres de restaurantes son recordatorios constantes de los peligros de las enfermedades transmitidas por los alimentos. Cada año, los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) estiman que 48 millones de personas enferman por enfermedades transmitidas por los alimentos. Aunque la mayoría puede recuperarse por sí sola, 128,000 personas son hospitalizadas con enfermedades graves transmitidas por los alimentos cada año, y los niños tienen un mayor riesgo de enfermarse.

“Los niños menores de 5 años tienen un mayor riesgo de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos porque sus sistemas inmunitarios aún se están desarrollando”, explica el Dr. Jeffrey Kahn, director de Enfermedades infecciosas en Children's Health℠ y profesor en UT Southwestern. “Todas las enfermedades transmitidas por los alimentos son evitables y proteger a su familia de las enfermedades transmitidas por los alimentos más comunes requiere solo algunas precauciones simples de seguridad alimentaria”.

¿Cuál es la causa más frecuente de enfermedades transmitidas por los alimentos?

Las enfermedades transmitidas por los alimentos se producen cuando los gérmenes, como bacterias, virus, parásitos o sus toxinas, contaminan los alimentos. El consumo de alimentos contaminados transfiere estos gérmenes al tubo digestivo, lo que causa malestar gástrico.

Los gérmenes que causan enfermedades pueden encontrarse en una variedad de alimentos, como carne y aves poco cocidas, huevos, alimentos enlatados incorrectamente y frutas y vegetales crudos. Existen más de 250 tipos de enfermedades transmitidas por los alimentos, pero los cinco que se contraen con más frecuencia son:

  • Norovirus.
  • Salmonella.
  • Clostridium perfringens.
  • Campylobacter.
  • Estafilococos.

El botulismo, la E. Coli, listeria y vibrio representan algunas de las enfermedades transmitidas por los alimentos más peligrosas. Aunque estos gérmenes son menos frecuentes que los mencionados anteriormente, las enfermedades que causan tienden a ser más graves, lo que provoca más hospitalizaciones.

Además, en los últimos años Texas ha informado múltiples brotes de ciclosporiasis, una enfermedad intestinal causada por el parásito ciclospora. Las infecciones suelen estar relacionadas con productos contaminados y causan diarrea acuosa. Para ayudar a prevenir la ciclosporiasis, lave bien todas las frutas y vegetales frescos. Cocinar los alimentos también matará al parásito.

Otro parásito intestinal que ha sido noticia recientemente es Cryptosporidium, que causa criptosporidiosis (a menudo llamada criptosporidiosis). Sus síntomas son similares a los de la ciclosporiasis y las enfermedades suelen confundirse.

¿Cuáles son los síntomas de una enfermedad transmitida por los alimentos?

Aunque los síntomas específicos pueden variar en los niños, las enfermedades transmitidas por los alimentos suelen ser de naturaleza gastrointestinal, lo que causa con mayor frecuencia malestar estomacal, vómitos y diarrea. Los síntomas pueden aparecer en pocas horas o demorar varios días. En la mayoría de los casos, el niño puede recuperarse en su casa en unos días. Sin embargo, asegúrese de buscar tratamiento si el niño tiene fiebre alta, sangre en las heces o está gravemente deshidratado (por vómitos o diarrea excesivos).

¿Cómo prevenir enfermedades transmitidas por los alimentos?

La forma más fácil de mantener a su familia a salvo de las enfermedades transmitidas por los alimentos es seguir las pautas de seguridad de los alimentos al prepararlos. Los CDC recomiendan un proceso de cuatro pasos: “limpiar, separar, cocinar y enfriar”:

  1. Asegúrese de que todas las superficies, los alimentos y las manos estén limpios y no cocine si está enfermo. Examine minuciosamente los alimentos. En el caso de los productos enlatados, deseche inmediatamente cualquier lata hinchada, golpeada o rota. Esté atento a los líquidos lechosos que rodean los vegetales.
  2. Separe la carne cruda, las aves, los mariscos y los huevos de los alimentos que se comerán crudos, como las frutas y vegetales. Use diferentes utensilios y superficies para manipular cada uno.
  3. Cocine la carne, las aves, los mariscos o los huevos a una temperatura adecuada para matar las bacterias. Mida la temperatura con un termómetro de alimentos.
  4. Coloque los alimentos perecederos que no haya comido en el refrigerador rápidamente y evite conservar los restos durante demasiado tiempo.

“Como regla general, los padres nunca deben comer o alimentar a su hijo con carne cruda”, dice el Dr. Kahn. “También recomiendo evitar la leche no pasteurizada o los productos elaborados con leche no pasteurizada”. Respete las fechas límites de venta y de caducidad de sus compras de alimentos. Por último, no le dé a un niño menor de un año miel cruda, que puede ser una fuente de toxina botulínica.

Qué hacer si hay una retirada de alimentos

Si se retira un alimento que compró, no lo coma ni lo abra. El aviso de retirada proporcionará instrucciones para cada producto específico y le dirá qué hacer con su comida, lo que generalmente incluye tirarla o devolverla a la tienda. Para estar al tanto de las retiradas de alimentos, guarde sus recibos de alimentos para recordar cuándo y dónde compró los alimentos. Además, conserve las etiquetas de los alimentos hasta que se hayan eliminado todos los restos. Visite FoodSafety.gov para revisar una lista de los alimentos retirados.

Si usted o el niño enferman debido a alimentos contaminados, comuníquese con el departamento de salud de su estado e informe la enfermedad. Esta acción ayuda a identificar los brotes. Hable con su profesional de la salud para determinar si las pruebas también ayudarían a identificar la enfermedad y crear conciencia sobre un posible brote. Por último, si puede, lleve un diario de alimentos de lo que comieron usted y su hijo, cuándo y dónde. Esta información es útil para identificar la causa de su enfermedad y también ayudará a los investigadores a localizar el origen del brote.

¡Gracias!

Ahora está suscrito al boletín familiar de Children's Health.

Children's Health no venderá, compartirá ni alquilará su información a terceros. Lea nuestra Política de privacidad.

Boletín familiar de Children's Health

Reciba consejos de salud y de crianza de los expertos de Children's Health dos meses al mes, directamente en su bandeja de entrada.

Leer más artículos como este

Powered by Translations.com GlobalLink Web Software