IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica

¿Qué es la IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica?

Los IRM (estudios de resonancia magnética) pediátricos se realizan con un equipo que tiene un túnel circular en el medio, el cual se usa para tomar imágenes. El IRM usa radiofrecuencia para crear imágenes bidimensionales y tridimensionales especializadas del cuerpo, sin el uso de radiación. La IRM para niños es versátil y especialmente útil para ver tejidos y órganos en cualquier parte del cuerpo que, de otro modo, solo podrían verse mediante cirugía.

Eso incluye:

• Vasos sanguíneos

• Médula ósea

• Cerebro

• Tejidos blandos, músculos, ligamentos, tendones y cartílagos

• Columna vertebral

¿Cuáles son los beneficios de una IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica?

Si bien la IRM y la radiografía son técnicas de diagnóstico por imágenes, la IRM puede tomar imágenes 3D más detalladas de órganos, tejidos y vasos sanguíneos sin exponer al paciente a la radiación.

¿Cómo preparo a mi hijo para una IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica?

Los estudios revelan que los niños y los padres afrontan mejor los procedimientos médicos si se preparan con anticipación. Le recomendamos que hable con su hijo sobre qué esperar antes de la cita programada usando los consejos y la información a continuación.

Hablar con los niños antes les permite tener algunos días para procesar la información y hacer preguntas para comprender mejor qué esperar. Aunque el procedimiento no es doloroso, a veces los niños se sienten nerviosos cuando no saben qué esperar o están haciendo algo nuevo por primera vez.

¿Cuándo debo hablar con mi hijo sobre su IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica?

• Preescolar: día del procedimiento

• Edad escolar: 2 a 3 días antes

• Adolescente: 1 a 2 semanas antes

¿Cuáles son las indicaciones de preparación antes de una IRM (imagen por resonancia magnética) pediátrica?

Sea honesto y proporcione explicaciones simples sobre qué esperar. Los niños necesitan saber qué verán, sentirán y escucharán durante los procedimientos.

• Ver. Al ingresar en la sala de IRM, verán una máquina grande con un túnel en el medio. Esta es la cámara. Durante la exploración, es posible que vean una película.

• Sentir.  Los IRM no producen dolor. Si la exploración se ordena con contraste, necesitarán una vía intravenosa antes de que comience la exploración.

• Oír.  La máquina es ruidosa. Escuchará varios sonidos de pitidos o golpes. Se le entregarán auriculares para escuchar la película o la música y, al mismo tiempo, reducir los sonidos de la máquina.

Permita que su hijo haga preguntas sobre la próxima experiencia.

• Si no sabe cómo responder las preguntas de su hijo, está bien decir “No sé”.

• Anote cualquier pregunta que desee hacer antes del procedimiento o llame al hospital para averiguarlo con anticipación.

Siga la pauta que le marque su hijo.

• Si no desea saber sobre el procedimiento, no fuerce una conversación ni lo abrume con información.

La práctica hace a la perfección. Es muy importante que su hijo permanezca quieto durante el estudio.

• Cree un juego que aliente a su hijo a practicar mantenerse quieto. Configure un temporizador a 2 minutos y aumente gradualmente el tiempo hasta 5 a 6 minutos. Puede resultar difícil quedarse quieto el día de la cita sin ninguna práctica previa.