Cómo sobrevivir al cambio de estación con un niño pequeño
Cómo pueden los padres ayudar a sus hijos pequeños a dormir bien
Dos veces al año, cambiamos los relojes para ajustarlos al horario de verano. Aunque una hora puede no representar una gran diferencia para los adultos, para los niños pequeños el cambio de horario puede significar la diferencia entre dormir lo suficiente y un niño demasiado cansado para estar feliz.
La Dra. Michelle Caraballo, neumóloga pediátrica y médica de medicina del sueño de Children's Health℠, asegura que el cambio de horario en el otoño puede ser especialmente difícil para los niños.
“Muchos niños despiertan cuando sale el sol, y de repente el sol sale una hora antes”, explica la Dra. Caraballo. “Si no se van a dormir una hora antes para adaptarse a este cambio, dormirán una hora menos por noche, lo que puede dar lugar a una variedad de alteraciones del comportamiento diurno, como irritabilidad, hiperactividad, dificultad para prestar atención y concentrarse”.
La Dra. Caraballo dice que los padres pueden ayudar a sus hijos a afrontar el cambio de horario utilizando prácticas que permiten dormir bien durante todo el año. Sugiere las siguientes tácticas para ayudar a los niños a dormir.
Inicie una rutina a la hora de acostarse
Una buena rutina a la hora de acostarse puede ayudar a que la mente y el cuerpo de su hijo se anticipen y se preparen para dormir.
“Una rutina a la hora de acostarse ayuda a que los niños duerman con regularidad y garantiza que duerman lo suficiente cada noche”, dice la Dra. Caraballo. “Cambiar la rutina puede reducir su ritmo circadiano y su horario de sueño”.
La rutina a la hora de acostarse de su hijo puede comenzar inmediatamente después de cenar apagando todos los aparatos electrónicos, incluidos la televisión, los teléfonos y las tabletas, que pueden mantener la mente demasiado despierta. Si su hijo sigue despierto por un rato, puede hacer actividades relajantes, como leer, armar rompecabezas o jugar un juego tranquilo.
La rutina a la hora de acostarse de su hijo puede incluir un baño después de la cena, ponerse el pijama, cepillarse los dientes y luego leer una historia antes de acostarse. Si está entrenando el control de esfínteres, es posible que su hijo también necesite una última visita al baño antes de abrazarlo y apagar las luces.
Mantenga la rutina a la hora de acostarse
Una vez que tenga en marcha una rutina a la hora de acostarse, es fundamental que la mantenga.
“Los niños pequeños son maestros en ganar tiempo y saben cómo empujar los límites para salirse con la suya”, dice la Dra. Caraballo. “Los padres a menudo se entregan a sus técnicas de ganar tiempo por diversas razones: quieren abrazarlos y mimarlos más, pueden permitir todas las visitas al baño que pidan los niños porque están entrenando el control de esfínteres, o simplemente se rinden porque están agotados”.
La Dra. Caraballo dice que preparar una tabla para la hora de acostarse puede ayudar a los niños a cumplir con el plan. La tabla debe tener imágenes de cada paso de la rutina, desde la hora del baño hasta el momento de apagar las luces. Si su hijo comienza a pararse o le pide que repita un paso de la rutina, puede señalar la tabla para ayudarlo a mantenerse encaminado.
Independientemente de las tácticas para ganar tiempo o de cuántas veces se levante de la cama, es importante que lleve a su hijo de nuevo a la cama inmediatamente. Sea amable pero firme y no entable una conversación al respecto. Rendirse ante las tácticas para ganar tiempo retrasa la hora de acostarse y alienta a los niños a seguir usando estos comportamientos en el futuro.
“Aunque el niño puede llorar, patalear y gritar, sepa que usted está haciendo lo correcto ayudándolo a establecer comportamientos saludables para dormir para que su hijo esté feliz al día siguiente”, dice la Dra. Caraballo.
Genere un entorno saludable para dormir
Un dormitorio oscuro, fresco y tranquilo es fundamental para ayudar a su hijo pequeño a dormir bien. Puede ayudar mantener su habitación de esta manera durante todo el año colocando un pequeño ventilador en la habitación y usando cortinas opacas para tapar el sol de la mañana.
También debe mantener todos los dispositivos electrónicos fuera de la habitación de su hijo, ya que pueden fomentar el juego y la distracción a la hora de acostarse.
Ajuste cuidadosamente la rutina a la hora de acostarse
Cuando se producen cambios en el horario de verano o necesita ajustar el horario de sueño de su hijo por otros motivos, debe tomar medidas cuidadosas para cambiar la rutina a la hora de acostarse.
“El ahorro de luz natural obviamente requiere que cambiemos los horarios de sueño en una hora de una u otra manera”, dice la Dra. Caraballo. “Le sugerimos que estos ajustes se realicen gradualmente en el transcurso de una o dos semanas antes del cambio de horario, en lugar de esperar que su hijo pequeño haga el cambio en una noche”.
Al menos una semana antes del cambio de horario, la Dra. Caraballo sugiere que su hijo adelante o atrase la hora de acostarse 15 minutos cada dos días, dependiendo de si es otoño o primavera. También puede mover la hora de la siesta para ayudar a su hijo a dormir lo que necesita a lo largo del día.
Una rutina y un entorno saludables a la hora de acostarse pueden ayudarle a realizar estos pequeños ajustes con mayor facilidad. Con preparación y paciencia, usted y su hijo pequeño pueden manejar los cambios de horario como profesionales y comenzar el día descansados.
Obtener más información
Obtenga más información sobre la importancia del sueño para los niños y cuánto tiempo deben dormir a cada edad. Para obtener información sobre los expertos en medicina pediátrica del sueño de Children's Health, visite nuestra Clínica Pediátrica de Trastornos del Sueño.
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