Bronquitis pediátrica
La bronquitis hace referencia a la infección y la inflamación de los conductos bronquiales de los pulmones, lo que trae aparejada una tos productiva (con expectoración).
¿Qué es la bronquitis pediátrica?
La bronquitis se produce cuando se infectan los bronquios (los tubos que van desde la tráquea hasta los pulmones). Esta irritación produce una acumulación de mucosidad. El niño tose para eliminar la mucosidad.
La bronquitis puede ser crónica (continua) o aguda (repentina). La mayoría de los niños tienen bronquitis aguda, causada por un virus o una bacteria. Con el tiempo, la afección mejora por sí sola o a través del tratamiento.
¿Cuáles son los diferentes tipos de bronquitis pediátrica?
Bronquitis crónica
La bronquitis crónica es principalmente una preocupación para los adultos. Es una afección continua y grave que suele ser causada por el tabaquismo o por la exposición al humo como fumador pasivo.
Bronquitis aguda
La bronquitis aguda puede aparecer después de un resfrío u otra infección respiratoria. Dura desde algunos días hasta 10 días, como máximo. Sin embargo, la tos puede persistir durante varias semanas después de que la infección haya desaparecido. Después de una bronquitis, puede producirse una neumonía.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la bronquitis pediátrica?
Entre los síntomas de la bronquitis, se incluyen los siguientes:
- Dolor de espalda o muscular a raíz de la tos
- Dolor en el pecho al toser
- Escalofríos
- Agrandamiento de las amígdalas y las adenoides
- Dolor de cabeza.
- Malestar general (sensación de agotamiento)
- Congestión nasal
- Falta de aire, opresión en el pecho
- Fiebre leve
- Dolor de garganta
- Sibilancias o sonidos de traqueteo al respirar
- Tos que puede provocar mucosidad blanca, amarilla o verdosa espesa
¿Cuáles son las causas de la bronquitis pediátrica?
La bronquitis puede ser causada por un virus o una bacteria. En el 90 por ciento de los casos, la bronquitis es vírica. También puede ser desencadenada por lo siguiente:
- Alergias
- Asma
- Agrandamiento de las amígdalas y las adenoides (glándulas que yacen en el paladar)
- Irritantes, como polvo, humos, vapores y la contaminación del aire
- Tabaquismo o exposición al humo como fumador pasivo (para la bronquitis crónica)
- Sinusitis crónica (infección sinusal)