Cada invierno, es posible que observe que el estado de ánimo de su hijo decae y que su comportamiento cambia, y que luego vea cómo vuelve a ser la persona de siempre una vez que llega la primavera. Incluso puede experimentar estos cambios estacionales usted mismo.
Nicholas J. Westers, Psy. D., ABPP (Junta Estadounidense de Psicología Profesional), psicólogo clínico de Children's Health℠ y profesor adjunto de UT Southwestern, dice que hay una afección que puede perjudicar la salud emocional de su familia durante los meses de invierno.
“Muchas personas expresan decepción con la disminución de la cantidad de luz natural durante los meses de invierno”, dice el Dr. Westers. “Sin embargo, cuando esa decepción se convierte en otros comportamientos, podría ser más que solo tristeza invernal. Podría ser depresión. Y si ocurre aproximadamente en la misma época todos los años, podría ser un trastorno afectivo estacional o TAE”.
Síntomas del trastorno afectivo estacional
El TAE es una forma de depresión significativa con un patrón estacional, que a veces se produce durante los meses de verano, pero con mayor frecuencia durante los meses de invierno (de noviembre a febrero).
Los síntomas frecuentes del TAE incluyen los siguientes:
- Somnolencia excesiva y dificultad para despertarse por la mañana
- Más de dos semanas de tristeza o irritabilidad significativas
- Mayor aislamiento social y retraimiento
- Antojos de carbohidratos
- Disminución de la energía
- aumento de peso
Trastorno afectivo estacional en niños y adolescentes
Aunque la edad común de aparición es alrededor de los 20 años, incluso los niños pequeños pueden experimentar TAE. El TAE suele ocurrir con menos frecuencia en niños y adolescentes que en adultos, pero del 3 al 4 % de los niños y adolescentes pueden sufrir síntomas. Muchos adultos con TAE informan que su primer episodio comenzó cuando tenían menos de 18 años.
Aunque las mujeres tienen significativamente más probabilidades de experimentar TAE que los hombres, los varones tienen tasas ligeramente más altas que las niñas durante la infancia. A medida que los niños crecen, las tasas de TAE aumentan tanto para los varones como para las niñas, pero una vez que llegan a la pubertad, las adolescentes tienen mayor riesgo de desarrollar TAE y tienen tasas más altas que los adolescentes varones.
Además de los síntomas mencionados anteriormente, el TAE en niños y adolescentes suele incluir dormir más, tener más dificultades de lo habitual para despertarse por la mañana y tener un mal desempeño en la escuela. El Dr. Westers explica que, a diferencia de los adultos, los niños a menudo no son conscientes de estos cambios estacionales y pueden actuar en lugar de expresar verbalmente sus sentimientos.
El TAE es más frecuente en el norte, donde hay menos horas de luz solar en invierno que en el sur (p. ej., alrededor del 1 % de las personas en Florida en comparación con alrededor del 9 al 10 % en Nuevo Hampshire). Dado que el TAE es menos frecuente en el sur, es menos probable que las personas lo reconozcan o busquen ayuda.
¿Qué causa el TAE?
Todavía queda mucho por aprender sobre el TAE, especialmente en niños y adolescentes. Aun así, la mayoría de las investigaciones señalan una alteración en el ciclo sueño-vigilia, en la que la menor cantidad de horas de luz diurna provoca un aumento de la hormona melatonina, que normalmente alcanza su punto máximo durante las horas de oscuridad y ayuda a promover el sueño. El ciclo sueño-vigilia se desincroniza con la luz solar y la oscuridad, y el aumento de la melatonina durante el día puede contribuir a los síntomas depresivos.
Además, la serotonina química del cerebro, que normalmente se asocia con sentimientos de felicidad, a menudo disminuye durante los meses de invierno. La disminución de la serotonina, junto con un aumento de la melatonina y un ciclo sueño-vigilia desincronizado, puede causar depresión durante los meses de invierno.
¿Qué debo hacer si creo que mi hijo está experimentando TAE?
Por definición, la depresión y el TAE provocan una alteración del funcionamiento cotidiano. Si su hijo se siente más que triste o estresado debido a los exámenes o a las fiestas, y usted nota que duerme más, no puede levantarse para la escuela, obtiene calificaciones más bajas de lo normal, se retrae de sus amigos, tiene exabruptos con usted y está más irritable y de peor estado de ánimo de lo habitual, debe consultar a un profesional de salud mental.
Si sucedió lo mismo el año pasado alrededor de la misma época (y quizás incluso el año anterior), su hijo podría estar sufriendo TAE. Si esta es la primera vez que sucede, podría ser una depresión significativa o incluso el comienzo del TAE.
Tratamiento para niños que experimentan TAE
Los padres pueden comenzar animando a sus hijos a jugar al aire libre durante las horas de luz diurna. La actividad física y el ejercicio al aire libre durante el día pueden ser suficientes para mejorar los síntomas. Si esto no parece funcionar, los padres deben considerar las siguientes opciones de tratamiento:
1. Fototerapia
Una de las formas más rápidas de mejorar los síntomas del TAE, incluso en pocos días, es usar una caja de luz. Se puede comprar en línea o en algunas tiendas, y se puede usar en casa durante solo 30 minutos por día (preferentemente por la mañana). Sin embargo, una vez que deja de usarse, los síntomas depresivos pueden volver tan rápido como se fueron.
2. Terapia cognitivo-conductual (TCC)
Las investigaciones recientes sobre la TCC para el TAE en adultos, que se centra en cambiar los pensamientos y comportamientos para influir positivamente sobre los sentimientos y mejorar los síntomas, han sugerido que la fototerapia y la TCC son eficaces para abordar el TAE, pero que la TCC tuvo mejor efecto dos años después.
3. Medicamentos antidepresivos
Si la fototerapia o la TCC no parecen ayudar, los medicamentos pueden aliviar los síntomas.
Recursos adicionales
- Kids Health: Trastorno afectivo estacional
- Health Central: Trastorno afectivo estacional en niños
- Academia Estadounidense de Pediatría: Tristeza invernal y trastorno afectivo estacional
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