El oído del nadador (otitis externa) es una infección en los tejidos blandos del oído externo, que es la parte del oído que se puede ver fuera del tímpano. Se produce cuando las bacterias u hongos penetran en los tejidos blandos y comienzan a crecer y propagarse.
Síntomas del oído del nadador
Además del dolor de oído, los niños con oído del nadador pueden oír los ruidos amortiguados o drenar líquido del oído.
“El oído del nadador puede causar dolor muy intenso debido a una hinchazón significativa en una zona con muchos nervios”, explica la Dra. Felicity Lenes-Voit, otorrinolaringóloga de Children's Health℠. “Si el dolor empeora al tirar de la oreja, puede ser un signo de infección del oído externo”.
¿Qué causa el oído del nadador?
Aunque se llama oído del nadador, los niños pueden contraer esta infección ya sea que hayan estado nadando o no. Cualquier cosa que provoque la ruptura de las barreras protectoras de la cera del oído puede provocar una infección. Incluso usar un hisopo para limpiar la cera puede lastimar el canal auditivo y causar una infección.
La cera protege el oído de infecciones de tres maneras principales:
- La cera actúa como barrera física, manteniendo las bacterias alejadas de las superficies del oído.
- La cera del oído es ácida, lo que genera un entorno poco agradable para las bacterias que prefieren un entorno más alcalino.
- La cera del oído contiene enzimas que descomponen las bacterias.
El agua y el cloro de las piscinas pueden secar la piel del conducto auditivo, por lo que los niños que pasan mucho tiempo en el agua pueden tener mayor riesgo de infección. Sin embargo, la mayoría de los niños que nadan nunca desarrollan la infección.
“Los niños tienen más probabilidades de contraer infecciones del oído externo si están inmunodeprimidos o si tienen diabetes”, dice la Dra. Lenes-Voit. “También pueden tener un riesgo mayor si tienen una afección de la barrera cutánea, como eccema”.
¿Cómo puedo prevenir el oído del nadador?
La mejor manera de prevenir el oído del nadador tanto en adultos como en niños es no introducir nunca nada en la oreja, ni siquiera hisopos.
“Nunca introduzca nada que sea más pequeño que su codo en la oreja”, dice la Dra. Lenes-Voit. “No queremos erradicar la cera de los oídos y muchas veces, al usar un hisopo o un pasador, simplemente la empuja más adentro del conducto auditivo y hace que sea más difícil que su oído se limpie a sí mismo”.
La Dra. Lenes-Voit dice que los tapones para los oídos tampoco ayudan necesariamente. Los niños con tubos en los oídos pueden usar tapones para los oídos cuando nadan en un lago o estanque, pero no los necesitan en una piscina. Los niños sin tubos para los oídos no necesitan tapones para los oídos.
Incluso las gotas protectoras que se venden en las tiendas pueden no ser útiles. La investigación no respalda su uso, y pueden secar los oídos.
Si su hijo está experimentando infecciones repetidas por oído del nadador, hable con el médico sobre las maneras de proteger los oídos de forma segura antes de probar cualquier medida preventiva.
Cómo deshacerse del oído del nadador
El oído del nadador puede resolverse por sí solo, pero normalmente se trata con antibióticos en gotas. Si es muy doloroso, las pautas de la Academia Estadounidense de Otorrinolaringología–Cirugía de Cabeza y Cuello recomiendan alternar entre dosis de Tylenol y Motrin adecuadas para la edad cada pocas horas. La mayoría de los niños no necesitarán analgésicos más fuertes. Si el dolor no mejora después de comenzar con las gotas óticas antibióticas, la evaluación del pediatra o el otorrinolaringólogo es muy importante.
“Los antibióticos tópicos son mucho más eficaces y tienen menos riesgos que los antibióticos que se toman por vía oral”, dice la Dra. Lenes-Voit.
Muchos antibióticos son seguros para colocar en el oído, incluso si hay una perforación o si el niño tiene tubos en el oído. Sin embargo, algunos pueden causar pérdida auditiva si el tímpano no está intacto. El médico puede examinar a su hijo y recetarle un tratamiento seguro.
En algunos casos, el conducto auditivo del niño puede estar tan inflamado que las gotas no pueden llegar al lugar de la infección. Es posible que su hijo deba consultar a un otorrinolaringólogo que pueda limpiar cualquier residuo o colocar una mecha. Una mecha es un pequeño trozo de algodón estéril que se coloca en la oreja. Luego, las gotas pueden pasar a través de la mecha hasta el tímpano. Lamentablemente, la colocación de mechas y la limpieza de oídos pueden ser dolorosas para los niños, pero en estos casos son fundamentales para mejorar.
¿Hay remedios caseros para el oído del nadador?
Algunos remedios caseros pueden ayudar con el oído del nadador. Sin embargo, solo es seguro usarlos si sabe con certeza que el tímpano de su hijo está intacto y que estos remedios no funcionarán tan rápido como los antibióticos.
Un remedio para el oído del nadador es diluir el vinagre con peróxido de hidrógeno, en una solución aproximadamente al 50 %. El vinagre ácido puede ayudar a eliminar las bacterias del oído.
Algunos remedios caseros que se venden en tiendas utilizan alcohol de fricción, que probablemente debería evitarse, ya que puede secar demasiado el conducto auditivo, lo que lo hace más susceptible a infecciones, y podría ser perjudicial para la audición si hay una perforación en el tímpano.
No importa si elige antibióticos o un remedio casero, debe mantener el oído de su hijo seco mientras combate el oído del nadador.
“Recomendamos no bañarse ni nadar con una infección del oído externo”, explica. “Cuando su hijo necesite un baño, recomendamos que se duche y que usted le coloque una bola de algodón grande, cubierta con vaselina, en la abertura de la oreja para evitar que entre agua”.
La Dra. Lenes-Voit dice que los padres también deben buscar asesoramiento médico si la infección no mejora o empeora. También debe consultar a un médico rápidamente si su hijo tiene asimetría facial, cambios en la voz o la audición u otros síntomas que afecten los nervios de la cara.
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