Isaiah es un niño muy activo al que le encanta andar en bicicleta, jugar al aire libre y leer libros de aventuras. Cuando el niño de 9 años se quejó de que le dolía la pierna un domingo por la noche, su madre enfermera, Kristi, no pensó mucho en eso.
“Mis hijos se caen todo el tiempo cuando corren”, dice Kristi. “Supuse que se había lastimado jugando y no me di cuenta hasta más tarde”.
A la mañana siguiente, Isaiah tenía tanto dolor que no podía caminar ni ir a la escuela, así que Kristi lo llevó a la sala de urgencias local en su ciudad del este de Texas. Aunque el tobillo estaba ligeramente hinchado, una radiografía reveló que no había fracturas óseas. Los médicos le colocaron un dispositivo ortopédico blando y le dijeron a Isaiah que regresara si no mejoraba en unos días.
El dolor de piernas de Isaiah persiste sin respuestas
Isaiah volvió a la escuela al día siguiente, pero a media mañana, la enfermera llamó a Kristi. Isaiah estaba en su consultorio quejándose de que el tobillo le dolía tanto que le impedía permanecer sentado en clase. Kristi lo llevó a casa para descansar, pero Isaiah pronto tuvo fiebre, lo que hizo que Kristi sospechara que podía tratarse de algo más grave.
Viajaron a la sala de urgencias más cercana, donde los resultados de las pruebas de Isaiah fueron negativos para gripe y estreptococo. Los médicos sospecharon que probablemente había desarrollado una infección de las vías respiratorias superiores que desaparecería en unos días. Kristi no estaba satisfecha.
“Les pedí que hicieran una IRM, pero me informaron que no tenían las instalaciones necesarias en esa ubicación”, dice. “Cuando pedí hablar con un pediatra de guardia, me dijeron que no había necesidad; le dieron una férula nueva y nos enviaron a casa”.
La persistencia de una mamá da sus frutos
El jueves por la mañana, Isaiah tenía tanto dolor que Kristi sabía que necesitaba ayuda. Fue entonces cuando llamó al Instituto Andrews de ortopedia y medicina deportiva de Children's Health℠. El equipo pudo verlo ese mismo día.
“Cuando la mujer que atendió el teléfono escuchó a Isaiah dolorido de fondo, encontró la manera de hacerle lugar para una cita”, dice Kristi.
Kristi e Isaiah condujeron dos horas y media hasta el Instituto Andrews de Children's Health℠, lo recibieron en la entrada con un carrito para que Isaiah se desplazara porque aún no podía caminar. Lo llevaron a la sala de examinación de inmediato.
“Vimos por primera vez a Linda Grande, una enfermera con práctica médica pediátrica, que pidió ver las radiografías de Isaiah”, explica Kristi. “En cuanto miró las imágenes, sospechó que sabía exactamente lo que estaba pasando”.
A Isaiah se le diagnosticó osteomielitis, una infección ósea, en el tobillo, que requeriría cirugía. Para Kristi, fue un alivio finalmente tener una respuesta.
“Estaba asustada, pero me sentía aliviada porque finalmente se estaba haciendo algo para ayudar a mi hijo”, dice. “Sabía que el pronóstico es excelente si se puede detectar de forma temprana, y confiaba en que Isaiah estaría bien”.
Recuperación completa de la osteomielitis gracias a la acción rápida
Se preparó a Isaiah para la cirugía para extirpar la parte infectada del hueso. La cirugía fue un éxito y en menos de una semana, Isaiah estaba listo para volver a casa.
Durante las seis semanas que siguieron, Isaiah no pudo pisar con ese pie y utilizó un andador y una silla de ruedas para moverse en casa y en la escuela. A medida que se fortalecía, finalmente se le permitió pasar a una bota para caminar e inmediatamente compensó el tiempo perdido.
“Creo que ya va por su segunda bota y probablemente pronto necesite una tercera, porque ya la gastó”, dice Kristi.
Los controles de Isaiah continúan para asegurarse de que no quede ninguna infección residual en los huesos, pero todos los signos apuntan a una recuperación completa.
Para Kristi, no hay duda de que su hijo recibió la atención que necesitaba en el momento adecuado para evitar cualquier efecto grave y duradero.
“La atención que Isaiah recibió en el Instituto Andrews de Children's Health℠ fue absolutamente increíble”, expresa. “Sabemos que podría haber sido mucho peor y estamos muy agradecidos”.
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Como el único instituto pediátrico de su tipo en la región, el Andrews Institute for Orthopaedics & Sports Medicine de Children's Health brinda acceso conveniente a una gama completa de atención ortopédica y de medicina deportiva. Obtenga más información sobre nuestros servicios ortopédicos.
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