Sarpullido de contacto alérgico

¿Cuáles son los signos y síntomas del sarpullido alérgico de contacto?

Generalmente, la piel se enrojece, se inflama y, como consecuencia, aparecen ampollas. Las ampollas pueden formarse, romperse y dejar costras y escamas. Más tarde, la piel puede oscurecerse, adquirir una textura similar al cuero y agrietarse. La dermatitis alérgica de contacto puede ser difícil de distinguir de otros tipos de sarpullido.

Cómo descubrir la causa:

El dermatólogo y el paciente analizarán los materiales que entran en contacto con la piel de la persona en el trabajo y en el hogar para tratar de identificar el alérgeno. La mayoría de las dermatitis de contacto se diagnostican por la ubicación del sarpullido. A veces, la causa no puede identificarse a través de los antecedentes y el examen físico, y es posible que el dermatólogo deba realizar una prueba epicutánea. Las pruebas epicutáneas constituyen una forma segura y fácil de diagnosticar las alergias de contacto. Se aplican pequeñas cantidades de los posibles alérgenos sobre la piel en tiras de cinta adhesiva y se retiran después de dos días. Una alergia aparece como una pequeña mancha roja en el lugar donde se colocó el parche. Entre los alérgenos frecuentes, se incluyen el níquel, el caucho, los tintes, los conservantes, las fragancias, la hiedra venenosa, el roble venenoso y las plantas relacionadas.

Dermatitis por níquel. Una parte de determinados metales se encuentra en muchos productos metálicos. Muchos objetos cromados contienen suficiente níquel como para producir una reacción en personas sensibles. El acero inoxidable también contiene níquel, pero está unido tan fuertemente que es seguro para la mayoría de las personas sensibles al níquel. Los aretes que contienen níquel pueden causar dermatitis del lóbulo de la oreja, un problema muy frecuente en personas alérgicas al níquel. Este tipo de dermatitis puede comenzar con las agujas que se usan para perforar las orejas y los aretes. Solo se deben usar agujas de acero inoxidable estériles para perforar. Después de perforar, solo se deben usar aretes sin níquel durante, por lo menos, las primeras tres semanas. Los cierres de ropa hechos de hebillas de níquel, las cremalleras, los botones y los clips de metal pueden causar dermatitis. Las personas sensibles al níquel pueden sustituir este material por accesorios de nailon. La sudoración aumenta la dermatitis en las personas sensibles al níquel. Los artículos que contienen níquel pueden causar una sensación de picazón y pinchazos entre 15 y 20 minutos después de tocar la piel sudorosa. Puede aparecer un sarpullido después de uno o dos días. Estos mismos artículos se pueden usar durante varias horas sin problemas, si no hay transpiración.

Caucho, un culpable frecuente. Los productos de caucho suelen causar dermatitis alérgica de contacto. Los aditivos químicos en el caucho pueden causar la reacción. El caucho, especialmente el látex, también puede causar reacciones alérgicas inmediatas, como picazón, ardor y urticaria (ronchas). Algunas personas presentan picazón, lagrimeo y, muy pocas veces, falta de aire. Esto es más frecuente en las personas que usan guantes de goma ajustados, como los trabajadores en el sector médico. Los guantes de goma también pueden causar dermatitis en la piel de las manos debajo del guante. Los guantes de goma sin talco pueden ser menos alergénicos. Pueden sustituirse por guantes de vinilo u otros guantes sintéticos. Muchas mujeres que tienen alergia al caucho pueden usar ropa interior confeccionada con un tejido sintético elástico llamado “licra” si las prendas no tienen sujetadores o bordes con base de goma. Es posible adquirir ropa interior que no contiene goma. La mayoría de los casos de dermatitis alérgica de contacto causada por los zapatos se deben a los componentes del caucho usados en la confección del zapato. Es necesario sustituir el calzado que contiene goma. Los adhesivos en los zapatos también pueden causar problemas. Incluso los zapatos de cuero pueden contener adhesivos.

Tintes para el cabello. La mayoría de las personas pueden teñirse el cabello sin problema. Sin embargo, algunas son sensibles a la PPD (parafenilendiamina). Este componente orgánico se encuentra en tintes permanentes para el cabello que se mezclan con otras sustancias químicas, como el peróxido, antes de la aplicación. Las personas alérgicas a la PPD no deben usar tintes permanentes para el cabello. Alrededor de un cuarto de las personas alérgicas a la PPD también son alérgicas a los componentes de los tintes semipermanentes. Siga las instrucciones del envase para realizar una prueba epicutánea antes de usar cualquier tinte para el cabello. La mayoría de las personas alérgicas a la PPD pueden usar tintes o enjuagues temporales para disimular las canas y dar brillo al cabello. Sin embargo, algunas personas también reaccionan a estos tintes. Si bien rara vez se usa PPD en las prendas de vestir, quizás haya otros tintes que puedan tener una reacción cruzada con la PPD. Como resultado, algunos pacientes sensibles a la PPD no pueden usar ropa oscura, especialmente si está confeccionada con fibras sintéticas, como el poliéster y el nailon. Alrededor del 25 % de las personas sensibles a la PPD también son alérgicas a determinados anestésicos locales, como la benzocaína, que están relacionados químicamente con la PPD.

Neomicina. La neomicina es un alérgeno frecuente que se encuentra en cremas, ungüentos, lociones, gotas para los oídos y gotas oftálmicas, tanto de venta libre como recetados. También se usa en combinación con otros antibióticos tópicos, esteroides tópicos y cremas de primeros auxilios. El ungüento Neosporin, las cremas de triple antibiótico y otras pomadas contienen neomicina. Con frecuencia, las personas alérgicas a la neomicina que tratan cortes, rozaduras, sarpullido y dermatitis por hiedra venenosa con cremas de venta libre que contienen neomicina presentan dermatitis inducida por la neomicina.

Productos para el cuidado de la piel. Los perfumes, las lociones y los cosméticos pueden causar dermatitis alérgica de contacto. Algunas personas son sensibles a los productos químicos con fragancia usados en los productos para el cuidado de la piel. Otras son sensibles a los productos químicos conservantes necesarios para evitar que los productos para el cuidado de la piel se echen a perder. Las personas con alergia a las fragancias pueden usar productos “sin fragancia”, pero a estos productos se les puede agregar una fragancia para cubrir el olor de los productos químicos. Hay muy pocos productos que realmente no tienen conservantes, pero las personas pueden ser sensibles a un producto químico conservante y no a otros. Esto se puede determinar mediante pruebas epicutáneas.

Cromatos. Los cromatos contienen cromo y suelen ser responsables de la dermatitis alérgica de contacto causada por el cemento, el cuero, algunos fósforos, pinturas y productos antióxido. El contacto con el cromo es frecuente en los trabajos de soldadura, fundición y cemento y en los sectores automotriz, ferroviario y de mantenimiento de edificios. Los cromatos se usan para curtir el cuero para confeccionar calzado y ropa. La dermatitis por el calzado puede deberse al cuero que contiene cromatos. Se puede usar calzado curtido con vegetales como alternativa. Algunos fósforos contienen cromatos. Tocar los fósforos que todavía no se usaron puede contaminar los dedos. El humo de un fósforo encendido y la cabeza del fósforo apagado también contienen trazas de cromatos. Si se colocan fósforos usados o cajas de fósforos en el bolsillo, se produce la contaminación del forro del bolsillo.

Hiedra venenosa y especies relacionadas. Esta familia de plantas incluye la hiedra venenosa, el roble venenoso y zumaque venenoso. En los EE. UU., estas plantas producen muchos casos de dermatitis alérgica de contacto. La reacción tiene el mismo aspecto en todos los casos. A menudo, los pacientes presentan líneas de pequeñas ampollas en la piel donde la planta los rozó. Las personas sensibles a la hiedra venenosa, el roble y el zumaque suelen ser alérgicas a los aceites de plantas de otros países. Una laca para muebles obtenida del árbol de laca japonés contiene dicho aceite, al igual que las cáscaras de mango y las cáscaras de las castañas de cajú.

¿Cómo se trata el sarpullido alérgico de contacto?

Las personas que tienen dermatitis alérgica de contacto deben hacer lo siguiente:

• Evitar el alérgeno que causa la reacción y las sustancias químicas que reaccionan de forma cruzada con él. El dermatólogo puede ayudarle a identificar los elementos que usted debe evitar.
• Sustituir los productos que no causan reacciones. El dermatólogo puede sugerirle recursos que le permitirán sustituir estos productos.