Limpieza de primavera: consejos para incluir a los niños

La limpieza de primavera puede ser excelente para su salud física y mental. Contrarrestar el desorden y reorganizar puede ayudar a que usted sienta más tranquilidad en el hogar. Y eliminar el polvo, el moho y el polen puede aliviar los síntomas de las alergias estacionales.

Incluso si usted no tiene alergias, la limpieza de primavera reduce la cantidad de bacterias con las que vive; y eso hace que su hogar sea un lugar más saludable para usted y sus hijos. También es una oportunidad para enseñarles a sus hijos a limpiar y mantener un espacio saludable.

Los beneficios de que sus hijos participen en la limpieza de primavera

Existen varios beneficios de la participación de los hijos en la limpieza de primavera. Se incluyen los siguientes:

• Compartir más tiempo en familia. Cualquier actividad que hagan juntos cuenta como tiempo en familia: tiempo que sus hijos probablemente recordarán mucho más que el tiempo que pasan frente a una pantalla.
• Aumentar la actividad física. Al limpiar, se mueve el cuerpo; y muchos niños (y adultos) pueden beneficiarse al moverse más.
• Una oportunidad para aprender habilidades nuevas. Lleva tiempo aprender a limpiar bien todo el baño. Pero su hijo se sentirá orgulloso cuando domine esa habilidad.
• Aprender a trabajar en equipo. Cuando uno se encarga de realizar una tarea importante en equipo, se aprende a negociar y a comunicarse mejor. Usted también se da cuenta que el “trabajo” no parece un “trabajo” cuando lo hace con compañía.
• Enseñar a los hijos a compartir la carga. Es importante que los niños aprendan que el orden y la limpieza del hogar no le corresponde a una sola persona.
• Incentivar la autoestima. Cuando los niños realizan tareas, sienten una gran satisfacción y aumenta su confianza.

Tareas de limpieza adecuadas según la edad de los niños

Los niños de todas las edades pueden ayudar con la limpieza. La clave es asegurarse de no pedirles que hagan algo que no pueden hacer. Si se sienten contentos por haber realizado la tarea, es mucho más probable que quieran volver a ayudar. Y si se sienten frustrados y enojados, no querrán volver a hacerlo.

Estas son algunas ideas de tareas de limpieza que son adecuadas según la edad de los niños:

• De los 2 a los 3 años de edad. Los niños pequeños pueden guardar los juguetes, apilar los libros en un estante y limpiar áreas pequeñas con una mopa seca.
• De los 4 a los 5 años de edad. Los niños de esta edad también pueden limpiar las mesas con un trapo, limpiar el polvo o los zócalos con un calcetín en la mano, juntar y separar la ropa por color para lavarla y usar una aspiradora de mano.
• De los 6 a los 10 años de edad. Cuando los niños llegan a esta edad, los padres pueden añadir más tareas a la lista, como hacer las camas, guardar la ropa doblada, barrer y limpiar el suelo con una mopa húmeda, sacar la basura y aspirar.
• De los 11 años de edad en adelante. A los niños más grandes se les puede añadir tareas más complicadas, como limpiar el refrigerador, los lavabos, los inodoros, las duchas y las ventanas.

8 consejos para hacer la limpieza de primavera con los niños

Es importante recordar que los niños considerarán que la limpieza es una tarea horrible si usted piensa lo mismo. Tener una actitud positiva hacia la limpieza puede ayudar a que sus hijos comprendan que incluso se puede pasar un buen momento realizando las tareas imprescindibles. Estos son algunos consejos prácticos para hacer que toda la familia participe de la limpieza de primavera:

1. Asignar tareas al azar

Si se asignan las tareas de forma azarosa, habrá menos discusiones entre los integrantes de la familia. Si casi toda su familia puede realizar varias tareas de limpieza, escriba los trabajos en unas tarjetas o en trozos de papel, pliéguelos, póngalos en un sombrero o recipiente y pídales a todos que saquen uno.

2. Ocuparse de un espacio de la casa a la vez

Tratar de limpiar la cocina, los dormitorios y los baños al mismo tiempo puede causar estrés innecesario. En cambio, limpie una habitación a la vez, para que los niños puedan ver fácilmente los resultados de su arduo trabajo. Si se tarda más de lo previsto en terminar de limpiar una habitación, continúe con las demás otro día.

3. Fomentar la donación

Si usted tiene mucha ropa o muchos juguetes, hable con sus hijos sobre donarles los artículos viejos a niños que no tienen juguetes nuevos.

4. Enseñar a realizar la tarea

No espere que sus hijos sepan cómo realizar una tarea de limpieza si no les mostró cómo hacerla. En primer lugar, explíqueles y muéstreles cómo realizar la tarea. Luego, pídales que repitan las indicaciones antes de comenzar.

5. Hágales comentarios positivos

Primero, comente lo que hicieron bien. Usted podría decirle lo siguiente a uno de sus hijos: “Haz hecho un buen trabajo al limpiar el mostrador aquí. Pero veo que quedó una mancha por limpiar. ¿La has visto?”.

6. Poner música

Reproduzca música alegre para mantener a los niños motivados. Deje que cada niño elija una canción y vea qué rápido se limpia y se organiza todo.

7. Hacer que la tarea sea entretenida

Invente juegos para que el rato que estén limpiando sea un rato de juego. Puede hacer una búsqueda del tesoro para encontrar objetos, como un calcetín perdido, envoltorios de caramelos o recibos; y quien encuentra más, gana. También, puede enseñarles a sus hijos cómo hacer burbujas con el detergente para lavar la vajilla para descansar entre tareas. Aliente a sus hijos a que también inventen sus propios juegos mientras limpian.

8. Recompensarlos

Puede motivarlos para que terminen si luego los recompensa con algo que les guste. Recompénselos por la limpieza que hicieron con una noche de pizza, una película en familia u otra actividad divertida.