Los niños pequeños tienen mucho que aprender. Al igual que dominan las habilidades motoras básicas y el habla temprana, también necesitan empezar a aprender a usar la bacinilla y dormir en una cama de “niño grande”. A continuación, ofrecemos consejos sobre cómo entrenar con éxito para que use la bacinilla y duerma en su propia cama.
Relájese sobre el entrenamiento para usar la bacinilla
Cada niño es diferente. Algunos niños pueden empezar a entrenar antes de los tres años, mientras que otros no están listos hasta que se acercan al cuarto cumpleaños. Incluso si usted ya está listo para dejar de cambiar pañales y calzoncitos entrenadores, el proceso fluirá mejor si espera a que su hijo empiece a entrenar cuando decida que está listo.
“El mejor enfoque para dejar el pañal es no forzarlo”, dice la Dra. Alice Ann Holland, ABPP (Junta Estadounidense de Psicología Profesional), neuropsicóloga clínica certificada por la junta y directora de investigación del Servicio de Neuropsicología de Children's Health℠. “Para los niños que tienen problemas para usar la bacinilla, puede convertirse en una batalla de voluntades. No es productivo”.
La Dra. Holland dice que los niños que no están listos pueden sentirse ansiosos por este cambio de vida aterrador y desconocido, que puede conducir a resistencia. Es mejor esperar hasta que el niño le indique que está listo para comenzar el entrenamiento en el uso de la bacinilla. Esto hará que el proceso sea mucho más fácil tanto para el niño como para el padre o la madre.
Cuando su hijo se acerque a la edad en la que puede querer entrenarse, puede empezar a presentar el tema de forma positiva y con baja presión. Por ejemplo, puede leerles libros sobre el entrenamiento en el uso de la bacinilla, pedirles que jueguen a la “bacinilla” con muñecas, dejarles jugar e incluso practicar con una bacinilla de entrenamiento de tamaño infantil, o modelar buenos comportamientos hablando con ellos sobre cómo usar el baño y lavarse las manos.
Si tiene una bacinilla de entrenamiento para su hijo, no la presione para usarla. Deje que se sientan completamente vestidos mientras están en el baño para acostumbrarse. Deben desarrollar sentimientos positivos (o al menos neutros) sobre la bacinilla.
Cuando el niño se interese más por usar la bacinilla, sea comprensivo, pero no insista demasiado. Elogie mucho cada vez que use la bacinilla, pero no lo presione a usarla todo el tiempo. No se enoje por derrames o por el desorden. Deje que avancen en el entrenamiento a su propio ritmo.
“Por muy embarazoso que pueda ser tener a un niño de cinco años con pañales entrenadores, si todavía está entrenando el uso de la bacinilla, no pasa nada”, dice la Dra. Holland. “Dígale a su hijo: ‘Cuando estés listo para pasar al siguiente paso, podemos pasar al siguiente paso’. Si se les da cierto control sobre el proceso de entrenamiento de la bacinilla, a menudo es más eficaz”.
Establecer reglas para dormir
Si bien es importante adoptar un enfoque relajado para el entrenamiento de los baños, es posible que los padres tengan que ser más estrictos para el entrenamiento del sueño.
“Muchos padres dirán: ‘está bien que duerman en nuestra cama; les ayuda a dormir’”, dice la Dra. Holland. “Pero en algún momento, hay que hacer cumplir que dormir en su propia cama es importante. Su hijo no puede tener 10 o 12 años y seguir durmiendo en la cama con mamá y papá”.
Dormir en su propia cama no proporciona la misma motivación que un pañal húmedo incómodo, dice la Dra. Holland. Por lo tanto, es posible que los padres deban intervenir y establecer reglas para cambiar los comportamientos del sueño.
Primero, intente identificar si hay algún problema de ansiedad que esté afectando la capacidad del niño para dormir solo. ¿Tiene miedo a la oscuridad? ¿Les molesta dormir en un piso de la casa diferente al de sus padres?
“Los problemas de sueño a menudo se deben a la ansiedad, especialmente en edades tempranas”, dice la Dra. Holland. “Debe llevarlo más allá de su zona de confort, pero ser sensible sobre cómo hacerlo y hacerlo gradualmente”.
Por ejemplo, puede instalar luces nocturnas o dormir en un dormitorio de huéspedes en el mismo piso que su hijo durante un breve período de tiempo. Si el niño duerme junto a usted todas las noches, establezca una regla de que solo puede hacerlo cada dos noches. La frecuencia permitida debe disminuir gradualmente con el tiempo. Haga cumplir las reglas, incluso si su hijo o hija protesta. Si la ansiedad del niño sobre el sueño persiste o empeora, puede ser útil consultar a un psicólogo pediátrico que pueda trabajar con usted y su hijo para desarrollar un plan individualizado para promover mejores comportamientos del sueño.
Obtener más información
Para obtener más información sobre el entrenamiento del sueño y dejar de usar el pañal, hable con su pediatra de Children's Health o especialista en medicina del sueño.
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