Preston siempre fue feliz y sumamente activo. Disfruta de practicar deportes y jugar a los videojuegos y de pasar tiempo con sus amigos.
Por eso, cuando comenzó a tener fuertes dolores de estómago y bajar de peso de manera considerable en el verano de 2016, sus padres sospecharon que podía estar pasando algo realmente grave. Preston tenía 11 años de edad en ese momento.
“Llevamos Preston al pediatra, que realizó varias pruebas, pero todas resultaron normales”, cuenta Marlo, su madre.
Preston fue remitido a un especialista en alergias alimentarias, pero después de varias citas, el médico no pudo determinar qué andaba mal. La familia probó dietas de eliminación de alimentos, pero nada ayudó.
“Cuando nos íbamos de la última cita con el alergista, nos dimos cuenta de que dependería de nosotros averiguarlo”, dice Marlo.
La familia de Preston encuentra respuestas en Children's Health
Durante los próximos meses, los síntomas de Preston persistieron hasta que una amiga sugirió que se pusiera en contacto con el Dr. Bradley Barth, gastroenterólogo pediátrico de Children's Health℠ y profesor de UT Southwestern, para obtener ayuda.
“El esposo de nuestra amiga había trabajado para Children's Health en el pasado y nos habló sobre la gran reputación del Dr. Barth”, dice Marlo. “Pensaba que el Dr. Barth probablemente podría ayudarnos a averiguar qué estaba pasando con Preston”.
En la primera cita de Preston con el Dr. Barth, un análisis de sangre y una colonoscopia confirmaron que tenía la enfermedad de Crohn, una IBD (enfermedad inflamatoria intestinal) crónica que causa inflamación en el tracto gastrointestinal.
“No era lo que queríamos escuchar, pero al menos teníamos una respuesta”, dice Marlo.
El Dr. Barth recetó un esteroide por vía oral, que ayudó a mitigar los síntomas de Preston, y comenzó a trabajar con su familia para determinar una solución de medicamentos a largo plazo. El objetivo del Centro pediátrico de enfermedad inflamatoria gastrointestinal Southwestern de Children's Health es lograr la remisión sin esteroides para los pacientes, y lo hacen en más del 80 por ciento de los casos.
Preston y su familia decidieron utilizar un antiinflamatorio inyectable que se usa en muchos pacientes con enfermedad de Crohn de moderada a grave. Funcionó, pero tenía efectos secundarios desafortunados.
“Cuando le daba las inyecciones a Preston, le dolían tanto que gritaba de dolor”, dice Marlo. “Sabíamos que el medicamento estaba funcionando, pero ambos temíamos cada vez que llegaba la hora de la siguiente inyección”.
Una cuidadora defiende a Preston
La familia de Preston se enteró de que había disponible una nueva forma de su medicamento, que se esperaba que fuera menos dolorosa que la que estaba tomando actualmente. Sin embargo, cuando fueron a surtir la nueva receta, la familia se enteró de que el seguro médico se negaba a cubrirlo porque el medicamento actual ya estaba funcionando.
Para Phuong Luu, PA (auxiliar médica), que formaba parte del equipo de atención de Preston, eso era inaceptable. Phuong pasó seis horas hablando con la compañía del seguro médico para explicar por qué Preston necesitaba cambiar de medicamento. Su insistencia valió la pena, y al poco tiempo las inyecciones de Preston fueron indoloras.
“Deberían haber visto la expresión de Preston cuando el medicamento no le dolió”, dice Marlo. “Me abrazó muy fuerte y lloró de felicidad”.
Sueños de baloncesto para Preston
En la actualidad, más de dos años después de su diagnóstico, Preston está muy bien. Aunque experimenta brotes ocasionales de los síntomas, la enfermedad de Crohn está en gran medida en remisión. Su padre, Brenden, recuerda la angustia inicial de Preston cuando se le diagnosticó y pensó que la afección significaría una vida sin deportes. “Rápidamente entré a Internet a buscar jugadores de la NBA con enfermedad de Crohn y me encantó mostrarle que hay muchos atletas profesionales con enfermedades digestivas”, dice. “Hay esperanza”.
“Preston tiene una personalidad muy divertida, que se vio afectada cuando estaba enfermo, pero ahora que se siente mejor, volvió a su antigua personalidad”, dice Marlo. “No sabemos cómo agradecer al equipo de atención de Children's Health por luchar por él y cuidarlo tanto”.
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Clasificado entre los mejores del país por U.S. News & World Report, el Departamento de Gastroenterología de Children's Health es sede del Programa Pediátrico IBD de Atención a la Enfermedad Inflamatoria Intestinal de Southwestern, un programa multidisciplinar líder de excelencia en el cuidado de niños con esta enfermedad. Obtenga más información sobre nuestros programa y servicios.
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